El impacto del TOC en el desempeño escolar es muy fuerte y termina de ahondar las causas y las consecuencias de este trastorno.
La vida escolar de un niño con TOC
A partir de algunos ejemplos, veamos cómo es la vida académica de un niño o joven con TOC. Por supuesto, esto depende del grado del TOC. (Recuerden que entre más temprana sea su aparición, es más complejo y de mayor gravedad y su diagnóstico es más desalentador).
- Si tiene la obsesión por la comprobación, a la hora de realizar una tarea o una consulta, tarda mucho más tiempo del normal, pues necesita ejercer el ritual de la comprobación una y otra vez, para saber que lo leído es correcto o que él maneja el tema a la perfección; además, racionaliza mucho sobre lo leído y difícilmente queda satisfecho; por eso, busca muchas fuentes, las cuales lee varias veces, convirtiendo el proceso de consulta en un círculo vicioso que no da resultados. Es común que no concluya la tarea. Como consecuencia, si tiene varias tareas el tiempo escasamente le alcanzara para realizar una.
- Cuando va a iniciar una tarea, necesita preguntar de manera reiterada cómo la puede hacer, para conseguir la aprobación del otro; es decir, se le dificulta iniciar por su cuenta.
- Lo mismo al escribir: escribe y borra porque piensa que lo puede hacer mejor. Esto lo hace repetidamente varias veces. Esto como consecuencia de que le inculcaron el perfeccionismo.
- Si tiene la obsesión por la limpieza, se llena de miedos para tomar sus cuadernos o útiles (al considerar que están sucios o contaminados) a tal punto que no copia, por lo que se atrasa. Puede suceder que tenga otro miedo que lo refleja en el temor de tomar los cuadernos, sin que el maestro o el padre se percaten de esta condición tan grave.
- En clase, por estar pensando en su obsesión se engloba, no presta atención, lo cual es totalmente involuntario.
- En una evaluación, lee reiteradamente las instrucciones o los cuestionamientos o tacha y escribe muchas veces hasta que se le agota el tiempo y, sin proponérselo, deja las hojas en blanco.
- Rompen los escritos o trabajos varias veces, por considerar que no tienen la calidad esperada.
- Si va a leer, puede contar las líneas de los párrafos. Si el número coincide con uno que considera de mala suerte, detiene la lectura porque considera que algo malo puede suceder.
- Expresa sus miedos al momento de leer; por ejemplo, si ve una imagen que les impresiona, por decir un personaje con una herida, no lo sigue leyendo o muestra temor, pues piensa que a él le va a pasar algo desastroso.
Como consecuencia, este tipo de chicos, por lo general presentan un déficit autoadministrativo en, prácticamente todos los contextos en los que se desenvuelven; por lo tanto, manifiesta fallas en las funciones ejecutivas: planeación, organización, ejecución.
Por ser el TOC una condición que con el tiempo se torna más crónico, se comprueba que si no reciben un tratamiento asertivo, sus funciones cognitivas tiene un gran deterioro (memoria, atención, motivación) que impacta en su condición mental. Por eso, muchos de ellos, de adultos no pueden responder a un ámbito universitario o laboral.
Martha Lucina Hernández,
creadora de Pedagogía Sana
- Correo:
Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo. - WhatsApp: +57 3148146346
- Facebook: https://www.facebook.com/pedagogiasana/
- Instagram: https://instagram.com/pedagogiasana_/
- Página web: www.pedagogiasana.com
Da clic sobre el título para leer:
El Trastorno Obsesivo Compulsivo, TOC
Contexto familiar de niños con TOC