Pedagogía Sana es un enfoque terapéutico que te acompaña a interpretar y comprender, de forma sabia y consciente, a los nuevos niños y jóvenes de hoy, que son “Semillas Estelares”, quienes presentan condiciones como déficit de atención, hiperactividad, impulsividad, autismo, alta sensibilidad, aprendizaje divergente y Down, entre otros.
Ellos vienen a traer el amor a la Tierra y a expandirse con características como la sabiduría, la creatividad, la alegría, el poder, la fuerza, la armonía, la alta sensibilidad, pues son psíquicos, intuitivos, movidos y empáticos con la naturaleza.
Al ser más conscientes y tener una forma de pensar, sentir y actuar más expandida, generan, igual, desmotivación, enfocan su atención de forma diferente, muchos presentan dislexia y discalculia, impulsividad, hiperactividad, problemas de lenguaje, disfasia, problemas de conducta, altas capacidades y depresión. Esto porque su organización cerebral es diferente.
Nuestro propósito debe ser el de conectarnos con su poder y sentirlos como seres de luz (eso es lo que son), no como los niños problema y amenazantes, no como niños a los que hay que cambiar y opacar.
Este enfoque va dirigido a padres, madres, maestros y personas en general, que resuenan con esta información, quienes tienen apertura de mente y están deseosos de actualizarse y despertar en conciencia porque son sensibles, empáticos, capaces de aceptar el cambio como parte de la trascendencia y la evolución.
Todo es energía, todo es vibración. A veces, no somos conscientes qué significa esta realidad. Nos encontramos frente a uno de los mayores cambios que se ha generado en la Madre Tierra frente a los albores de la construcción de un planeta consciente, liberado y trascendido; un planeta que, como conciencia viva, ha despertado y nos lleva, con su impulso, a que nosotros lo hagamos como humanidad.
Atrás ha quedado la educación represora, opresora, castigadora, discriminadora; aquella que se brinda desde el “niño interior herido”. Despertar en conciencia es abrirnos paso a paso a un mundo lleno de resplandor, luz, magia, alegría y brillo; es soltar esa guía ensombrecida para enfocarnos en la verdadera grandeza de nuestras almas y las almas de nuestros niños y jóvenes, quienes vienen a construir y a trascender en este momento de luz.
Honrar y respetar su vida es un deber para con cada uno de estos seres magnificentes. Ya es hora de dejarlos de ver desde la etiqueta y los niños problemas.
Ha triunfado la luz y el poder del amor. Esto nos lleva a un reto mayor: actualizarnos. Esto para ser responsables en el acompañamiento de estas nuevas almas, lo que implica un cambio de perspectiva, pues ellos (avatares) vienen con un ADN muy desarrollado. Como consecuencia, son incomprendidos por un mundo inconsciente y por una educación obsoleta en donde no se hallan sus espíritus.
Por eso, actualizarnos conlleva a sanar nuestro interior, como camino para saber interpretar conscientemente el por qué y el para qué de la presencia de estos niños de luz, pues desde el amor y un acompañamiento consciente es que ellos se abrirán y expandirán su ser divino en esta nueva conciencia.